En 1843 un pueblo de las montañas aragüeñas fue
fundado para desarrollar y fomentar el desarrollo agrícola e industrial, para
ello trajeron un grupo de inmigrantes alemanes especialistas en los quehaceres
de la tierra. Ciento sesenta y nueve años después esta comunidad llamada
Colonia Tovar vive básicamente del turismo y la siembra, con la particularidad
de representar un pedacito de Alemania en tierras venezolanas. La gente va a
comer fresas con crema, comprar vegetales, disfrutar de una deliciosa rodilla
de cerdo y adquirir artesanía, pero más allá de eso esta tierra revela la fuerza de trabajo de
miles de personas que formaron su carácter entre las costumbres europeas y las criollas.
Personas enseñadas a laborar de forma dura, a elaborar todo con cuanto cuentan,
a valorar su suelo y a formarse estándares de calidad. De ellos podría decirse
que ostentan una de las mejores formas de hacer turismo de Venezuela, esa que
los hace prestar un servicio de calidad y caminar siempre hacia la excelencia.
El Ejemplo
del Selva Negra
Ronald Gutmann lleva ocho años al frente del hotel
más antiguo de La Colonia Tovar, como antes lo hizo su padre y los otros
miembros fundadores de este establecimiento. Desde el principio los dueños
asumieron la labor de formar a muchas de las personas que en la actualidad
cuentan con su propia oferta de servicio. Ellos continúan manteniendo la
tradición en sus paredes y pisos de madera que se encuentran abarrotados de
elementos decorativos históricos, copados de la esencia alemana y rodeados de verde, mucho verde que tal vez
es una de las características que más hace resaltar en los tiempos modernos a
este lugar.
Ronald llegó desde Inglaterra ávido de aplicar en
su suelo los conocimientos adquiridos. Reconoce que le ha costado lograr el
consenso, pero también indica que ha sido persistente para que todos los
comerciantes de su pueblo vayan en una misma dirección. Este joven no sólo se
encarga de la administración y se enorgullece de ser el chef del Hotel Selva Negra (http://www.hotelselvanegra.com),
también dirige la Cámara de Comercio del poblado, al cual considera ya una
ciudad porque asegura que su crecimiento ha tenido pasos de gigante. “Por eso se
necesitaba un ente que funcionara como un gremio, que defendiera y representara
correctamente los intereses de los comercios de La Colonia Tovar”. Así que
cuando se le pregunta por la oferta que regenta se le hace difícil no
promocionar al resto de sus compañeros. Indica que existen unas mil ochocientas
habitaciones disponibles en el poblado y que todas tienen diferentes
características. Relata que hay casas de familia que albergan huéspedes los fines de semana, cabañas con las comodidades
necesarias para preparar comida dentro de ella, hoteles modestos, posadas de
lujo, spas para consentir el cuerpo y la mente y por supuesto también habla de
su opción que encierra un poco de todo “contamos con cuarenta habitaciones que
van desde habitaciones sencillas hasta suites presidenciales. Tenemos una
piscina climatizada, centro de masajes, un restaurante que ofrece y una de las
mejores gastronomías de la zona café, y muchas áreas verdes para caminar,
sentarse a leer un libro o simplemente disfrutarlas”.
Para Gutmann La Colonia Tovar se encuentra en un
radio alrededor de ocho millones de personas que se traducen en clientes
potenciales y ellos simplemente lo que hacen es tratar de aprovechar ese
potencial turístico que viene buscando atención. “nosotros amamos mucho La
Colonia Tovar. Ella representa todo lo que tenemos y lo que queremos ser”.
Manos
Benditas
Quien visita esta población debe estar claro que es
difícil no dejarse tentar por la oferta que se presenta en cada calle del
poblado. Desde que comienzan las caminatas por el centro saltan a la vista los
colores de las hortalizas y las frutas frescas, hay que recordar que estas
montañas se caracterizan por dejar brotar de sus suelo fresas y duraznos
sustento de su economía; los embutidos son otra de las tentaciones que aquí se
venden, hay empresas como Charcutería Tovar totalmente industrializadas o la
Salchichas Gunter, realizadas de manera artesanal. Aquí todos hacen algo con
sus manos para luego ofrecerlo al turista. Así se pueden citar ejemplos como el
de Tulio Müssle y su padre que producen vinos, licores dulces y cremosos. Los
venden en las tienditas del pueblo o directamente en su casa donde tienen la
pequeña fábrica. Los que van a buscar estas bebidas con sabor a parchita,
arequipe, chocolate o durazno también pueden escuchar la charla de cómo se
elaboran los productos. Los Müssle producen unos cuatro mil quinientos litros
de licor al año y han tomado esto como una empresa familiar donde laboran padre
e hijo y sus esposas. La artesanía de igual forma tiene su espacio muy bien
posicionado en La Colonia Tovar, Isabel Breindenbach es una de la más
reconocidas de la zona ella utiliza una técnica de pintura alemana para adornar
unos platos decorativos. Llama “comitas” a sus dibujos que han ganado
concursos y que vende en el local que abrió en su casa donde además el
visitante puede tomarse un café y comerse un dulce mientras escoge.
De Paseo por
la Colonia
Para conocer un poco más allá de los confines de
las calles del centro del pueblo varios emprendedores se han organizado para ofrecer
paseos por casi todo el municipio. La familia Kanzler es pionera en
organización de estos viajes (Rustic Tours). A su empresa le siguieron otras cuatro para
abastecer la demanda de pasajeros que desean embarcarse en estos vehículos rústicos.
Rustic Tours cuenta con veintiún
camionetas que realizan diferentes rutas que van a la selva, la zona agrícola,
los petroglifos (en La Colonia Tovar hay una zona de piedras pintadas) o hasta
la playa. Casi todos los recorrido terminan con lo que ellos llaman un “rustiqueo”
por carreteras de tierra, que resulta ser el atractivo más solicitado por los
turistas. Para los Kanzler lo más importante de este negocio es que es algo que
se hace en familia, como todo en este pedacito del estado Aragua; en la empresa
participan hermanos, sobrinos, primos y amigos allegados, de esta forma se
ayudan todos. La Colonia Tovar es como una gran familia apegada a las raíces
alemanas de su fundación, que aunque perdieron costumbres importantes como el
idioma, mantienen el empeño laboral, la unión familiar y la laboriosidad que
les permite crear un mundo para ellos y las generaciones que vienen.
LOS
DATOS
Donde
Quedarse
-
Hotel
Frankfurt: (58)244-4187770
Donde
Comer
-
Restaurante El Molino: (58)244-3551394
-
Restaurant La Ballesta: (58)244-3551156
Para Divertirse
-
Rustic Tours: (58)244-3551908 /416-4336400
Texto: Erika Paz
@erikapazr
Fotos: Raymar Velásquez
@raymarven
hola somos 30 personas en cuanto tienes la posada 04169548308 yenny castillo
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